¿QUÉ ES ABDOMINOPLASTÍA?
La abdominoplastía es una operación quirúrgica que se utiliza para extirpar el exceso de piel y tejido graso del abdomen y para afirmar los músculos de la pared abdominal. La abdominoplastía no es un tratamiento quirúrgico para personas con exceso de peso. El individuo obeso quien desee perder peso deberá posponer todo tipo de formas de cirugía orientadas a moldear el contorno del cuerpo hasta que sean capaces de mantener su peso.
Las formas alternas del manejo de esta condición consistirían en no tratar las áreas de piel flácida y depósitos de grasa. La liposucción puede ser una alternativa quirúrgica a la abdominoplastía si hay buena elasticidad de la piel y depósitos de grasa abdominales localizados cuando el individuo es de peso normal. Los regímenes de dieta y ejercicio pueden ser beneficiosos en la reducción general de grasa excesiva.
Un abdomen protruyente como resultado de músculos abdominales débiles (por embarazos, envejecimiento, obesidad), piel estirada y exceso de grasa, produce disconformidad diariamente en miles de personas. Esta condición no responde bien a dietas y ejercicios pues la piel y los músculos subyacentes están estirados o separados.
Técnica Quirúrgica:
Una abdominoplastia completa normalmente toma 2-4 horas, dependiendo de la extensión de los trabajos.
Durante el procedimiento:
Hay varias técnicas quirúrgicas que pueden variar dependiendo del cirujano y del caso en particular. La empleada más frecuentemente consiste en una incisión transversa a lo largo del abdomen inferior, de cadera a cadera, justo encima del área púbica (en casos necesarios se realiza una incisión vertical, del pubis al esternón o se realiza una incisión circunferencial, de ser necesarias estas técnicas previamente serán discutidas).
Una segunda incisión se hace alrededor del ombligo para liberar el mismo de la piel flácida y mantenerlo en su lugar.
Después se separan o se levantan las capas de piel y tejido graso de la pared abdominal.
El siguiente paso consiste en fortalecer y juntar los músculos abdominales hacia la línea media. Esta maniobra, aplana el abdomen y define mejor la cintura.
Posteriormente, la piel se tracciona en sentido inferior y se remueve el exceso o sobrante, dejando la piel tallada. En este paso, el cirujano hace un pequeño orificio sobre la piel para exteriorizar el ombligo que siempre ha permanecido en su sitio. Finalmente, las heridas son suturadas, se colocan tubos de drenaje bajo la piel para drenar cualquier exceso de líquido del sitio quirúrgico. Los drenajes se exteriorizan en la región del vello púbico a través de pequeños agujeros, y se retiran aproximadamente una semana después de la cirugía, y se coloca una faja elástica alrededor del abdomen, la cual debe utilizarse por 4 semanas. Debe utilizar micropore® para que no haya roce con los puntos o fricción directa de la herida con la vestimenta y a la vez proteger la herida.
Indicaciones y contraindicaciones:
La abdominoplastía o lipectomía abdominal es una intervención quirúrgica mediante la cual se puede reducir el abdomen protruyente, tallar la piel estirada y los músculos flácidos. No es un tratamiento para la obesidad ni un sustituto para la pérdida de peso. Está indicado en aquellas personas que no logran corregir sus defectos con dietas y ejercicios, particularmente cuando la piel y los músculos han sido estirados como sucede en embarazos múltiples o grandes aumentos y disminuciones de peso. Los pacientes con un peso dentro de los límites normales, pero con músculos abdominales flácidos, exceso de piel y grasa, son los mejores candidatos para esta operación. La pérdida de elasticidad de la piel que ocurre en personas mayores de 45 años con obesidad leve es otra condición que puede mejorarse con esta operación.
Recuerde que esta operación no es un substituto para la reducción de peso ni un tratamiento para la obesidad generalizada. Los mejores candidatos son aquellas personas con un peso dentro de los límites normales que tienen músculos abdominales flácidos y piel estirada o en exceso, que no mejoran con dieta ni ejercicio. La liposucción o aspiración de grasa en estos casos no es una alternativa, ya que en este caso se extrae la grasa, pero se aumenta la flacidez de la piel, obteniéndose resultados deficientes.
La lipectomía abdominal o abdominoplastía es una operación con muy buenos resultados y de gran beneficio cuando se hace bajo indicaciones precisas, además de que estos resultados son muy duraderos, prácticamente de por vida, siempre que la persona no incurra en cambios drásticos de peso o embarazos posteriores a la operación.
Riesgos:
La decisión de someterse a cirugía estética de abdomen es muy personal y que tendrá que decidir si los beneficios cumplirán sus objetivos y si los riesgos y complicaciones potenciales son aceptables. Su cirujano plástico y/o personal le explicará en detalle los riesgos asociados con la cirugía. Se le pedirá que firme formularios de consentimiento para asegurar que usted entiende completamente el procedimiento que se someterá y los riesgos y complicaciones potenciales.
Los riesgos incluyen:
- Cicatrices poco favorables
- El sangrado (hematoma)
- Infección
- Acumulación de líquido
- Mala curación de heridas
- Pérdida de piel
- Los coágulos de sangre
- Entumecimiento u otros cambios en la sensibilidad de la piel
- Riesgos de la anestesia
- Decoloración de la piel y / o inflamación prolongada
- El tejido graso que se encuentra profundamente en la piel puede morir (necrosis grasa)
- Mayor separación de la herida (dehiscencia)
- Asimetría
- La flojedad de la piel recurrente
- El dolor, que puede persistir
- La trombosis venosa profunda, complicaciones cardíacas y pulmonares
- Inflamación persistente en las piernas
- Daño en los nervios
- Posibilidad de cirugía de revisión
- Resultado estético subóptimo