¿QUÉ ES UNA MAMA TUBEROSA?
El pecho tuberoso o tubular se forma durante el desarrollo del seno. El crecimiento del pecho en vez de producirse en redondo se realiza solo hacia adelante desde la propia areola, sin abarcar la parte del medio e inferior de la mama. El desarrollo de las mamas a partir de esta base de implantación deficiente ocasiona que estas no puedan crecer adecuadamente y que su aspecto al final del desarrollo sea el de unas mamas demasiado separadas, con un polo inferior corto y con una forma, en mayor o menor medida, “tubular” y muchas veces caídas hacia abajo.
La Mama tuberosa, es el tipo más frecuente de una serie de malformaciones de la mama, conocidas en conjunto como anomalías de la base de implantación. Todas estas anomalías pueden corregirse con la cirugía estética.
En un alto porcentaje de casos estas mamas son además asimétricas, de manera que en una mama la anomalía es más acusada que en la otra o existen evidentes diferencias de volumen. En algunas ocasiones solo una mama presenta la anomalía y la otra tiene un aspecto normal. Para poder corregir estas anomalías mamarias, es fundamental haberlas diagnosticado correctamente.
Los objetivos de la cirugía de remodelación de la mama tuberosa son:
- Eliminar su forma cónica cambiándola por una forma más redondeada.
- Dar volumen adicional al pecho.
- Corregir el aspecto de la areola.
Corrección quirúrgica
La operación más realizada para la corrección de la mama tuberosa es el desplegamiento o técnica de Puckett.
Con la técnica de Puckett realizamos una remodelación glandular que comienza con la reducción del diámetro de la areola y termina, con la fragmentación de la banda de constricción (causante de la mama tuberosa) o brida en el polo inferior de la mama, para permitir la distensión cutánea y el desarrollo de la parte inferior de la mama.
Implantes mamarios o grasa propia
En la mayoría de los casos el procedimiento se completa con la implantación de una prótesis anatómica en el plano submuscular, que además de aumentar el volumen de la mama ayuda en la remodelación de la misma, especialmente a nivel del polo inferior.
En ocasiones se puede sustituir o complementar la implantación de una prótesis mamaria con una transferencia de grasa de la propia paciente.
En los casos en que estas mamas, además, son asimétricas, tendremos que realizar diversas técnicas y utilizar prótesis de diferentes dimensiones en cada mama, para obtener la mayor simetría posible.
La remodelación de la mama tuberosa no solo obtiene un beneficio estético además incrementa la autoestima y la seguridad en si mismas de la paciente lo que se refleja en todos los aspectos de su vida diaria.
Resultado de la cirugía de mamas tuberosas
La corrección quirúrgica de la mama tuberosa debe ser realizada por equipos quirúrgicos bien entrenados en el diagnóstico de todos los defectos de la mama, incluidos los más leves, y con una experiencia quirúrgica suficiente para abordar con éxito el remodelado mamario que exige la mama tubular. Con una técnica correcta en una sola intervención se soluciona y remodela el seno tuberoso.
El resultado es evidente desde el primer momento con un seno de forma redondeada, pero el resultado final lo obtenemos a partir de los 6 meses.